Su Majestad la Reina ha realizado una visita a la sede central de la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención de la Mujer Prostituida (APRAMP), donde ha conocido de primera mano su proyecto, cuyo objetivo es construir una sociedad libre de violencia y explotación donde las personas recuperen su libertad y su dignidad.
Imágenes de la visita
Doña Letizia ha visitado el Centro de Formación de la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención de la Mujer Prostituida (APRAMP), en su sede central en Madrid, donde ha conocido de primera mano el Proyecto Integral de esta entidad. Acompañada de la ministra de Igualdad, Ana Redondo, la Reina ha sido recibida por la presidenta de APRAMP, Rocío Nieto, y su directora, Rocío Mora, con quienes ha realizado un recorrido por las instalaciones del Centro de Formación Integral.
La visita al centro se ha programado con motivo de los nuevos retos ante los que se encuentra la entidad y la búsqueda de alternativas sociolaborales para las víctimas de trata y explotación. Este centro alberga todas las áreas formativas en un sólo espacio, incluyendo la Escuela de Moda y la Escuela de Supervivientes, proyectos insignia de la entidad con una metodología pionera de trabajo en la que se forma y se generan alternativas, retroalimentándose los proyectos en sí mismos.
Tras el recorrido de las instalaciones, espacios de trabajo y presentación del personal laboral y mujeres en atención, Doña Letizia ha presidido una mesa de trabajo con miembros del equipo técnico de la entidad y supervivientes, en la que Su Majestad ha obtenido un conocimiento más detallado del Proyecto Integral de APRAMP y de la última fase de desarrollo implementada en el Centro de Formación.
En la reunión han participado diferentes profesionales de la entidad para hablar del trabajo de APRAMP y sus resultados, de las dificultades y retos a los que las mujeres se enfrentan en su camino para la reconstrucción de sus vidas y la exploración de alternativas, así como los métodos que se plantea la entidad en el trabajo de acompañamiento. Los participantes en la mesa han explicado las diferentes vertientes del proyecto, como el Área de detección, cuyas responsables han hablado de los procedimientos de detección e identificación de víctimas y las dificultades para el acceso y vinculación con las mismas, así como de la necesidad de establecer mecanismos para la detección temprana.
Responsables del Área de atención integral se han referido a las dificultades y obstáculos a los que las mujeres se enfrentan en el proceso de recuperación y salida de la situación de explotación. El acompañamiento social es uno de los pilares fundamentales del proceso, en el que las profesionales se enfrentan a la necesidad de realizar ajustes de expectativas, trabajo de recuperación de habilidades sociales y personales, desarrollando la esencia del trabajo social más allá de las labores de gestión y burocracia.
También se ha explicado la necesidad de proporcionar acompañamiento psicológico, por el impacto a nivel emocional que sufren las víctimas cuando inician un proceso de salida de la explotación, así como los retos a los que se enfrentan en el camino de recuperación e inserción: gestión de la frustración, estrés postraumático, secuelas en el deterioro de la salud mental, disociación, falta de autoestima, etc.
Asimismo, en la reunión se ha explicado la labor del Área de Protección, porque la trata y la explotación sexual son dos delitos contra los derechos humanos, penados en el Código Penal español.
Según la legislación vigente, la carga de la prueba sigue recayendo sobre la víctima y su denuncia y declaración, lo que hace que ellas sean la diana de los tratantes y proxenetas y por lo tanto su protección es una prioridad absoluta para las entidades especializadas como APRAMP. Hacer confluir la protección y la recuperación de la libertad de las mujeres y niñas es el reto fundamental de los pisos de protección, y así lo han explicado las coordinadoras de esos recursos.
La formación como herramienta de capacitación
Ubicado en el centro de Madrid, el Centro de Formación alberga todas las áreas formativas de la entidad. Su Majestad ha sido informada de los procesos de aprendizaje, formación, búsqueda de alternativas e inserción laboral que se desarrollan de forma individualizada con las supervivientes.
Desde hace cuatro décadas, el Centro de Formación, además, impulsa su formación en dos áreas insignia: el Área de mediación social, enfocado en la formación y profesionalización de las supervivientes como mediadoras sociales y referentes en la creación y desarrollo de herramientas eficaces de detección y atención; y el Área de moda, en el que las supervivientes que forman parte adquieren conocimientos y experiencia profesional en el sector del diseño y creación de moda.
Reto principal: proporcionar alternativas reales y sostenibles y fomentar el empleo digno.
Sólo en el año 2023, un total de 673 mujeres iniciaron su propio proyecto formativo y 162 mujeres se insertaron en el mercado laboral, según APRAMP.
Cabe destacar, como objetivo de la inserción laboral, la contratación por APRAMP de una media de doce mujeres en el Área de Moda que, tras el emprendimiento de proyectos en colaboración con diseñadores jóvenes y de reconocido prestigio, dan un paso más con la creación y desarrollo de la marca sostenible “Moda con Alma by APRAMP”; así como 45 mujeres en el área de mediación social de la Unidad Móvil, lo que representan el 60% de la plantilla de la entidad.
Las áreas de empleo a las que se incorporan las supervivientes en el mercado laboral se basan también en la respuesta a sus intereses y proyección de futuro.ç
Acerca de APRAMP
APRAMP es una entidad sin ánimo de lucro especializada en la atención integral de mujeres y niñas desde un enfoque de derechos humanos con perspectiva de género. El propósito de APRAMP es el de construir una sociedad libre de violencia y explotación donde las personas recuperen la libertad y la dignidad. La razón de ser de lo que guía nuestro trabajo y de donde se desprende nuestra misión, visión y valores que rigen nuestra actividad. La lucha contra la trata y la explotación exige el compromiso de todos los actores sociales y de la sociedad en general, para desarrollar un movimiento de «tolerancia cero» contra esta forma de esclavitud y violencia contra las mujeres.
