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La oferta es válida para viajes entre el 1 y el 31 de agosto
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La oferta incluye trayectos entre Barcelona-Lyon y Barcelona-Marsella
Renfe pone en marcha una oferta para viajar en alta velocidad a Lyon y Marsella desde Barcelona a partir de 49 euros para visitar las dos ciudades que son sedes de los Juegos Olímpicos. Los billetes están a la venta ya para los desplazamientos entre el 1 y el 31 de agosto.
Marsella contará con dos sedes en estos Juegos Olímpicos. La Marina de Marsella y el Estadio Vélodrome. Hasta el 8 de agosto la Marina de la segunda capital francesa acogerá a cientos de regatistas lucharán por las medallas en las diez clases olímpicas de vela. El Estadio de Marsella, el segundo más grande de Francia (con capacidad para 67.000 espectadores) acogerá diez partidos entre el 24 de julio y el 10 de agosto, incluyendo dos cuartos de final y dos de semifinales.
El Estadio de Lyon, el tercero más grande de Francia con capacidad para 59.186 espectadores será una de las sedes más importantes en el ámbito futbolístico, pues acogerá 11 partidos: seis de fase de grupos, un partido de cuartos de final y semifinales por género y la final por el bronce de la competición femenina.
Esta oferta permitirá viajar desde Barcelona Sants, Girona y Figueres-Vilafant hasta Lyon y Marsella desde sólo 49 euros. Los trenes AVE que conectan España y Francia ofrecen además miles de plazas para viajar hasta Marsella desde Madrid, Zaragoza y Camp de Tarragona.
La promoción está disponible en el web www.renfe.com y en el resto de los canales de venta habituales, taquillas, máquinas de autoventa, agencias de viajes y en el teléfono 912320320.
Sostenibilidad y seguridad
Con esta oferta, la compañía ferroviaria quiere fomentar los desplazamientos durante el verano en el modo de transporte más seguro y sostenible, facilitando la visita a los Juegos Olímpicos de Francia que tendrán lugar este año entre el 26 de julio y el 11 de agosto.
Renfe cuenta con la certificación “Carbono Neutro” otorgada por AENOR
Para todos sus trenes eléctricos, tanto de viajeros como de mercancías, la cual cosa confirma el compromiso de la compañía con la sostenibilidad y la eficiencia. Estos vehículos no producen emisiones directas (no hay procesos de combustión) y dado que la energía eléctrica es de origen 100% renovable, se puede hablar de “descarbonización” o “neutralidad de carbono”, ya que no se producen emisiones indirectas tampoco en origen.
La circulación diaria de todos los trenes de Renfe (de viajeros y de mercancías) evita cada año la emisión de 4,1 millones de toneladas de CO2 y supone un ahorro energético equivalente a más de 1,1 millones de toneladas de petróleo.
