Se llama Edmundo Peláez, no tiene segundo apellido conocido, pero cuenta con un apodo, un mote o un alias, cada vez más popular entre sus amigos y seguidores: «Detective Cebolleta» o, simplemente, «Cebolleta».
Don Edmundo nació, literalmente hablando, hace un par de décadas; aunque hace años que cumplió ya los sesenta. Trabajó como banquero y en la actualidad está jubilado. Viste un poco «chapado a la antigua». Usa bastón y gorra. Lleva gafas. Luce una espesa barba blanca. Fuma pitillos de picadura. Bebe infusiones. Le encantan los chupitos de mistela. Y disfruta soltando grandes parrafadas.
Sus aficiones son las caminatas y la lectura, en especial los libros de intriga y misterio; aunque por lo que es realmente conocido, y hasta querido, es por su mala (o buena, según se mire) costumbre de «meter la nariz en lo que no le importa». Lo cual le acaba ocasionando algún que otro problema, pero también conduciéndolo a resolver importantes enigmas. Llegando, incluso, a colaborar con la policía.
Edmundo Peláez, evidentemente, no es una persona real. Es solo el protagonista ficticio de una saga de novelas del escritor Andrés Barroso de los Llanos. Pero si acompañas al «Detective Cebolleta» en «Caso para un novato», «La muerte de Van Gogh» o «La senda de las bicicletas», podrás compartir y vivir con él sus mismas intrigantes y misteriosas aventuras, y resolver los casos que él resuelve.
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CASO PARA UN NOVATO (Sinopsis)
La desaparición de Marta Solano, hija del director del Instituto Miguel de Cervantes, conmociona al pueblo de Villacruz y, en especial, a los alumnos y profesores del propio Colegio. Germán Solano, su padre, se siente responsable por haberle echado una fuerte reprimenda unos días antes al haber suspendido un examen.
El teniente Lucinio Antúnez y sus hombres de confianza, Luigi Tomasso y Sergio Gómez, ponen en marcha el operativo de búsqueda; y a su vez también lo hacen los compañeros de Marta, que, ante el agravamiento de la situación, deciden pedir ayuda al tío abuelo de una de las chicas del grupo: un banquero jubilado aficionado a las novelas de misterio, que acaba de llegar a la localidad a visitar a sus sobrinos.
Finalmente la intervención de Edmundo Peláez, al que todos identifican con el simpático apodo de «Cebolleta», será decisiva para la resolución del caso.
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LA MUERTE DE VAN GOGH (Sinopsis)
Jean François De la Rue, seguidor e imitador de la vida y obra del pintor Vincent Van Gogh, aparece muerto en su mansión de Roca Dulce. Todo parece indicar que se ha suicidado a los treinta y siete años de un disparo en el pecho, igual que hiciera su maestro. La declaración de un testigo y una alarma que no permitía el acceso a la vivienda parecen confirmarlo, haciendo que el encargado oficial de la investigación, el inspector Félix Gallardo, dé por buena a priori dicha hipótesis.
Sin embargo un agente novato y un recién incorporado forense no lo ven tan claro y, a espaldas de su jefe, deciden pedir ayuda a unos viejos amigos: Sixto, Marcial y Edmundo.
Simultáneamente un joven toxicómano llamado Lucas está viviendo, o más bien sufriendo una de las peores pesadillas de su corta existencia: «alguien le ha tendido una trampa».
Aunque de inicio nada parece vincular ambas historias, el devenir de los acontecimientos hará que las vayamos viendo cada vez más y más cercanas.
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LA SENDA DE LAS BICICLETAS (Sinopsis)
«Amigo Ed, soy Goyo, el Ballesta, he descubierto algo que sólo puedo compartir contigo. Es muy importante que vengas lo antes posible… o quizás cuando lo hagas ya sea demasiado tarde. Por favor no comentes con nadie esta llamada y bórrala del contestador nada más escucharla».
Este mensaje de un amigo de la niñez, que escuchó Edmundo Peláez en el contestador de su teléfono, le hizo viajar de inmediato a su pueblo natal, Ocaruela de la Encina, al que hacía dos décadas que no regresaba. Cuando llegó, su amigo había fallecido, supuestamente y según opinión de todos, de «muerte natural». Él no lo cree así y decide investigar. Para lo cual opta por ponerse en su lugar y continuar la labor que había estado desarrollando en sus últimos días.
Una granja escuela para adultos a la que el Ballesta había denunciado en dos ocasiones se convierte en su objetivo, y a la vez el propio Edmundo se convierte en el objetivo de los dirigentes sectarios de la granja.
Demasiados vecinos implicados, poca o nula colaboración del resto y la amenazante presencia de un expresidiario acechándolo constantemente, hacen que la vida de Edmundo Peláez no resulte fácil en el pueblo que lo vio nacer, haciendo que, incluso, esté a punto de perderla.
Andrés Barroso de los Llanos
Biografía del autor
Nació en la localidad toledana de Ocaña en 1963. Es un apasionado de la lectura desde su infancia, aunque no empezó a escribir hasta los cuarenta, y no se animó a compartir esas misteriosas e intrigantes historias, que solo escribía para pasar el rato, hasta haber terminado su quinta novela: La senda de las bicicletas, publicada en 2016.
En 2018 vio la luz Caso para un novato. Y en 2020, en plena pandemia, lo hizo Memorias de un asesinato rural. Su ópera prima. Aquel primer texto que, años atrás, le incitara a escribir.
El género policiaco es su apuesta. Y de ello da fe un exbanquero jubilado aficionado a las novelas de misterio llamado Edmundo Peláez, y apodado Cebolleta, que es el protagonista de Caso para un novato, La senda de las bicicletas y esta novela: La muerte de Van Gogh.
Los casos del Detective Cebolleta se desarrollan siempre en un entorno rural, emotivo y familiar, pero no están vinculados entre sí, por lo que pueden leerse de forma independiente.
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