Casa Real ha informado hoy a los medios de comunicación, y ha difundido unas fotos, de la participación de la Princesa Leonor, heredera a la Corona, en unos ejercicios de montaña y de esquí en el Pirineo aragonés junto a sus compañeros, 159 cadetes de la Academia General de Zaragoza. Estos forman parte de su formación militar y participa como una más con sus compañeros.
A la Princesa de Asturias se le ve en un momento previo a estos ejercicios en la estación de esquí de Astún. Con uniforme de camuflaje se le pierde la pista al juntarse con sus compañeros cuando va a iniciar un descenso. Este es su último entrenamiento militar de 2023.
La Academia General Militar tiene una larga y gloriosa tradición en formación de Oficiales del Ejército español. Los escasos tratadistas que han estudiado el tema de la Enseñanza Militar en España, como Clonard o Almirante, determinan que la «Compañía de los Cien Donceles», creada en 1340 por el Rey de Castilla Alfonso XI, aparece como el más antiguo precedente.
En el Renacimiento, la unificación de los Reinos de España y el avance del Arte de la Guerra provocan importantes innovaciones técnicas y tácticas, las cuales sentaron las bases de la Escuela Militar Española de la Casa de Austria y el dominio de los Tercios a lo largo de los siglos XVI y XVII. España iba a crear un Imperio universal y las necesidades de mantenimiento del mismo obligaban la creación de Escuelas o Academias que, bajo protección real, impartían formación militar, ubicándose en los más variados lugares del Imperio (Burgos, Milán, Sevilla, Barcelona, Lisboa, Orán, Cerdeña etc).
El primer proyecto de creación de un Sistema de Enseñanza Progresivo, que progresa de lo general a lo específico, se realizó a final del Siglo XVII, en 1674) en Bruselas, donde aparece la primera Academia Militar verdaderamente moderna para la enseñanza de la época. La Academia Militar del Ejército de los Países Bajos fue fundada en Bruselas por D. Sebastián Fernández de Medrano, conocido como el «Alférez Medrano» veterano de los Tercios de Flandes y nombrado su Director por su sólida formación científica y táctica. Esta Academia consiguió un merecido prestigio por la diversa procedencia de su alumnado, el carácter abierto de sus planes de estudios, las bases teórico-prácticas del proceso de aprendizaje, así como los destinos relevantes de sus alumnos, a los que se conoció como «Maestros de la Guerra». Este centro se puede considerar como el primer proyecto de Enseñanza General, así como un antecedente de lo que luego será la Academia General Militar.
Estos orígenes nos avalan para confirmar el carácter integral, evolucionista y plural que caracteriza a este Centro de Enseñanza, puntero en la formación Militar de los países más desarrollados.
Desde su fundación en el año 1882 y a través de sus tres épocas de actividad, ha formado a más de 29.000 oficiales del Ejército de Tierra, Guardia Civil y Cuerpos Comunes de las Fuerzas Armadas.