La Diputación de Alicante ha finalizado recientemente la construcción de una variante de la CV-728 a su paso por El Ràfol d’Almúnia, una actuación que ha supuesto una inversión de más de 1,5 millones de euros y que ha logrado reducir significativamente el tráfico de vehículos por el interior del casco urbano de la localidad.
El diputado del área, Arturo Poquet, ha destacado que esta obra «pone fin a un problema histórico que existía en el municipio», ya que anteriormente todos los vehículos que circulaban desde o hacia Pego, incluidos los pesados, tenían que atravesar el centro del pueblo.
La nueva variante, que afecta tanto a la CV-728 como a la CV-729, se encuentra en el límite noreste del suelo urbano y ha sido diseñada para minimizar el paso de vehículos por el casco urbano, «eliminando así el carácter actual de travesía y, en consecuencia, reduciendo los niveles de contaminación acústica y ambiental y mejorando la funcionalidad, la seguridad vial y la calidad de vida de los vecinos de la localidad», según ha señalado Poquet.
La infraestructura viaria absorbe una parte muy importante de los más de 1.300 vehículos que cada día transitan por el tramo de la CV-728 anterior a la variante, según los aforos de tráfico registrados.
La variante de la CV-728 conecta con el camino de Segaria mediante una glorieta de 46 metros de diámetro exterior y continúa hasta la intersección con la CV-729, que también se resuelve con una glorieta de 55 metros de diámetro exterior.
Con esta inversión, la Diputación de Alicante demuestra su compromiso con la mejora de la seguridad vial en la provincia y con la calidad de vida de sus ciudadanos.
