Denunciamos la situación de los bomberos de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, una historia de terror o la comedia más cruel que uno podría escuchar.
El pasado 2 de enero, parte de la ejecutiva local junto al candidato a la alcaldía del ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Ayoze Santana, atestiguamos la situación que atraviesa este cuerpo de emergencias de la ciudad capitalina. Hablamos de carencias propias de un país tercermundista y su nefasta gestión tanto por parte del mayor mando de este cuerpo como desde el mismo ayuntamiento.
Tareas básicas en cualquier bombero, tales como reponer el agua de los camiones después de una intervención, tienen que hacerlo fuera del parque de bomberos debido a que la toma de agua no funciona por falta de mantenimiento, así como la puerta por la que se accede al parque, que se cierra de forma defectuosa y ya ha sufrido en ocasiones más de un robo.
El movimiento “bomberos en lucha” ha sido quien nos ha enseñado en primera persona el estado de sus epis, agujereados y en muy mal estado. Estos equipos fueron provistos en 2010 y según el fabricante nos comentan que tiene una vida útil de 10 años, utilizado en sus mejores condiciones, premisa que no se da y que de por sí da a entender que trabajan con epi que se encuentra fuera de la fecha recomendada de uso del fabricante. Así se encuentra también sus equipos respiratorios, que usan en el momento de rescatar cualquier persona, como también para realizar intervenciones en cualquier incendio. La empresa Dräger era quien llevaba el mantenimiento de estos, pero al acabarse el contrato y no haberse firmado otro nuevamente estos equipos se encuentran actualmente sin ningún tipo de acondicionamiento.
Si al lector le parece dantescas estas condiciones, es porque aún no ha leído como se encuentran las instalaciones de su gimnasio, así como de las duchas y de todo el parque en general, sobre todo de los principales, de los cuales el parque de Miller ya se hizo conocido en redes tras haber sido propagado un video que denunciaba esto.
Hongos en las duchas, momentos en los que se quedan sin agua para ducharse, peligros de derrumbe por los que los mismos bomberos han llegado a clausurar edificios de esta misma ciudad… son cuestiones que uno no puede tolerar en un cuerpo de emergencias tan importante y que llevan ya peleando desde mayo de 2022.
Como si no fueran pocas las nefastas condiciones en las que hacen vida estos agentes de bomberos, también se encuentran amenazados por las administraciones, las cuales los amenazan con expedientarlos, los han denunciado y les han denegado permisos por tan sólo pedir un mínimo de dignidad en su puesto de trabajo.
Hoy en día nos comentan que son 125 agentes de bomberos para una ciudad como es Las Palmas de Gran Canaria, con 400.000 habitantes y 100.000 o 200.000 más de población flotante. En lo que respecta a la operatividad de los parques, nos comentan que más de una vez trabajan por debajo del mínimo exigible y nos denuncian la necesidad emergente de más agentes de bomberos, a lo cual el ayuntamiento no da respuesta.
La agrupación política CONTIGO Las Palmas de Gran Canaria como fuerza política deja claro que no va a tolerar esta mala gestión de un servicio tan importante por parte del alcalde del presente ayuntamiento, que ha demostrado no estar a la altura de las circunstancias, y se procederá a poner la correspondiente denuncia al diputado del común.
Ayoze Santana,
candidato a la alcaldía del ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.