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Donald Trump, gestos y expresiones que hacen singular su presencia como un “puñetazo en el ojo”
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Podría promocionar su propia marca DT, iniciales de su nombre, como un elemento de publicidad exterior con mucha notoriedad
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Morfología de su mirada para captar la atención del adversario
- El analista de expresión corporal no verbal y lenguaje oral, Julio García Gómez, director de comunicación de la Fundación Casaverde, descifra las claves estratégicas de una comunicación planificada
El experto asegura que «se concentran en el personaje las claves más evidentes de una estrategia de comunicación personal centrada en llamar la atención exageradamente y convertirse en el centro protagonista de actos, eventos y comparecencias televisivas, más allá de sus decisiones políticas tras la investidura”.
Donald Trump consigue el efecto publicitario marketiniano de ‘puñetazo en el ojo’, que los profesionales de la promoción de marcas atribuyen a carteles de calle impactantes, por lo que Trump se convierte en comparecencias públicas en un anuncio de promoción de su propia marca DT con mucha notoriedad. No desdeñemos la idea de que sus asesores creen una marca comercial para camisetas, gorras y demás enseres personales. Ya existen unas gorras Donald Trump, actualmente con su apellido, y el siguiente paso más discreto podría ser solo con las iniciales.
Esa mirada perdida en el infinito ¿desconfianza en los adversarios? Un punto de su triunfo ante Kamala Harris
Su proyección de mirada infinita, cargada de ironía, produce el objetivo de captar y desarmar al adversario, como ocurrió en el último debate electoral con Kamala Harris. En los análisis morfológicos gestuales, se considera que este tipo de miradas “evitativas”, se producen porque la persona quiere evitar el contacto visual, que puede ser interpretado como un signo de disgusto, poco interés o falta de confianza. A veces es muestra de inseguridad emocional o tiene la intención de querer ocultar algo.
Otro elemento gestual a tener en cuenta como algo singular es su caída de ojos con el músculo de párpado superior rígido, que muestra estrés hacia determinadas situaciones, como quedó patente en la asistencia el martes al oficio religioso en una catedral anglicana por un sermón a favor de los «niños transgénero» y los inmigrantes.
Poder de persuasión, elemento a favor y en contra de su popularidad
Su poder de persuasión es evidente en el tono de sus discursos con un énfasis estudiado, a pesar del timbre agudo de su voz. Debería trabajar más la voz, sus matices, educar el timbre, proyectarla con el diafragma y conseguir más matices y registros medios y agudos. Eleva en exceso la voz y a veces queda rota en los finales.
Este aspecto persuasivo en los discursos puede jugar a favor y en contra de su popularidad entre los ciudadanos de Estados Unidos y del resto del mundo. Por ello, debería medir mejor su capacidad de no pasar desapercibido.
Efecto “semáforo de sus corbatas” y singularidad del resto de su imagen
El pelo, peinado y color, pensado para el efecto fotográfico de fijación del foco de la cámara, son seña de identidad en el personaje, como algo fuera de lo común y al uso. El torso erguido, marcando distancias, es siempre evidente en sus comparecencias.
El color fuerte y llamativo de sus corbatas, con trajes ceñidos al cuerpo, le dan seguridad emocional. Hay un evidente “efecto semáforo” por el color estridente de sus corbatas, la mayoría de las veces en rojo stop, como característica personal de los individuos que visten según el humor con el que se levanten cada dia, en este caso el nervio y el impulso están en la planificación de su jornada.
Trump es único y singular. Un fenómeno del lenguaje corporal y habilidades de comunicación no ortodoxas, más allá de la política que practique.
