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La localidad ciudadrealeña de Daimiel ha celebrado con gran fervor las fiestas en honor a San Antón, patrón de los animales. Durante varios días, vecinos y visitantes han participado en una amplia programación de actos religiosos y populares que han llenado de vida las calles de la localidad.
La tradicional bendición de animales, la hoguera y la rifa del guarrillo han sido algunos de los momentos más destacados de estas fiestas. Numerosos daimieleños han acudido a la plaza de Santa María junto a sus mascotas para recibir la bendición del párroco.
Un homenaje a las tradiciones
La Peña Ecuestre «Rocinante» ha sido la encargada de organizar estos actos, que se han convertido en una de las citas más importantes del calendario festivo de Daimiel. El alcalde de la localidad, Leopoldo Sierra, ha destacado la importancia de mantener vivas estas tradiciones que nos unen como comunidad.
«La fiesta de San Antón es mucho más que una celebración religiosa», ha señalado el alcalde. «Es una oportunidad para reencontrarnos con nuestros vecinos, compartir momentos especiales y transmitir nuestros valores a las nuevas generaciones».
Solidaridad con los afectados por la DANA
Este año, la fiesta de San Antón ha tenido un marcado carácter solidario. La recaudación de la rifa del guarrillo se destinará a ayudar a los damnificados por las inundaciones del pasado mes de octubre.
El presidente de la Peña Ecuestre «Rocinante», Miguel Gómez-Limón, ha mostrado su satisfacción por la gran participación ciudadana en los actos de San Antón. «Nuestro objetivo es mantener viva esta tradición y hacer que cada año sea más especial», ha afirmado.
Con estas celebraciones, Daimiel demuestra una vez más su arraigo a las tradiciones y su solidaridad con los más necesitados.