La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha anunciado una ambiciosa inversión de 8 millones de euros destinada a mejorar la sostenibilidad, la accesibilidad y la eficiencia energética de 13 bienes culturales de la región. Este proyecto, enmarcado en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, permitirá poner en valor nuestro rico patrimonio y hacerlo más accesible a todos los ciudadanos.
Los 13 bienes culturales seleccionados para esta intervención son auténticas joyas arqueológicas y monumentales que representan la diversidad y riqueza de nuestro pasado. Entre ellos se encuentran parques arqueológicos como Carranque, Segóbriga y Alarcos, yacimientos visitables como Ercávica y Noheda, y monumentos como Monsalud y Bonaval.
Un plan integral para un patrimonio sostenible
Las actuaciones previstas se centrarán en cuatro ejes fundamentales:
- Transición verde: Implementación de medidas de eficiencia energética, instalación de energías renovables y reducción de la huella de carbono.
- Accesibilidad: Mejora de los accesos, adaptación de los espacios a personas con discapacidad y creación de rutas accesibles.
- Digitalización: Desarrollo de aplicaciones móviles, creación de contenidos digitales y mejora de la señalización.
- Competitividad: Fomento del turismo cultural a través de la creación de nuevos productos y servicios turísticos.
Además de estas medidas generales, se llevarán a cabo actuaciones concretas como la instalación de escaparates agroalimentarios y artesanos, la creación de una red de rutas turísticas y la puesta en marcha de espacios de arte digital.
Un compromiso con el futuro
Con esta inversión, la Junta de Comunidades demuestra su compromiso con la conservación y puesta en valor de nuestro patrimonio cultural. Al mejorar la accesibilidad y la sostenibilidad de estos bienes, se garantiza su preservación para las futuras generaciones y se fomenta un turismo cultural más responsable y sostenible.
El Consejero de Educación, Cultura y Deportes, Amador Pastor, ha destacado que «esta iniciativa es un paso fundamental para poner en valor nuestro rico patrimonio y hacerlo más accesible a todos los ciudadanos. Queremos que nuestros yacimientos y monumentos sean un referente cultural y turístico, y esta inversión nos permitirá alcanzar ese objetivo».
Beneficios para la región
Esta inversión tendrá un impacto positivo en múltiples ámbitos:
- Cultural: Preservación y puesta en valor del patrimonio cultural.
- Económico: Fomento del turismo cultural y creación de empleo.
- Social: Mejora de la calidad de vida de los ciudadanos y fomento de la cohesión social.
- Ambiental: Reducción del impacto ambiental y promoción de la sostenibilidad.