El cierre del proyecto UNION EUROPEA DE TRABAJADORES Y PENSIONISTAS (UETP) es un acontecimiento que me obliga a pensar que, la decisión tomada no es sencilla y está marcada por factores personales y organizativos. La mención del cansancio y la mezquindad contra la que hemos tenido que luchar como un motivo para dar por concluido el proyecto sugiere una reflexión sobre el tiempo y la energía que se requiere para llevar a cabo iniciativas de esta naturaleza. La implicación de factores externos han sido un tema recurrente en el ámbito del activismo y la política ( no solo en este partido), donde la vitalidad y la capacidad de respuesta son esenciales para enfrentar los desafíos que se presentan, pero no estamos dispuestos a luchar contra la sordidez la mentira la difamación y la envidia.
Otro motivo, es el relacionado con la actuación del anterior secretario general y responsable de informática, su actuación introduce un elemento de conflicto interno que ha sido devastador para nuestra organización. La apropiación de información y contactos, que nos ha dejado ciegos informáticamente, así como la difusión de bulos y falsedades, no solo socavan la confianza dentro de la organización, sino que también pueden dañar la reputación del proyecto ante el público y los potenciales colaboradores, a lo que no estamos dispuestos en lo absoluto.
Este tipo de situaciones pone de manifiesto la fragilidad de las estructuras organizativas y la importancia de contar con líderes que actúen con integridad y transparencia. La decisión de poner el proyecto en «stand by» puede interpretarse como un acto de prudencia.
En un contexto donde la desinformación y la manipulación maligna pueden prevalecer, es fundamental dar un paso atrás y evaluar la situación con claridad. Este tiempo de reflexión puede ser crucial para redefinir objetivos, fortalecer la cohesión interna y, eventualmente, reorientar el proyecto hacia un futuro más prometedor. El futuro de la formación UETP, como se menciona, queda en el aire. La pausa en el proyecto puede ofrecer la oportunidad futura de reconstruir, de aprender de los errores y de establecer una base más sólida para más adelante.
La historia de los movimientos sociales y políticos está llena de ejemplos de renacimientos y transformaciones que, aunque nacen de la adversidad, siempre pueden dar lugar a iniciativas más robustas y efectivas. En conclusión, la decisión de estacionar el proyecto UETP, da una oportunidad para la reflexión y la renovación, y el tiempo, efectivamente, dirá cuál será el destino de la formación.