-
En su primer año de funcionamiento el hospital ha atendido a más de 200 pacientes de los cuales el 87% recuperaron su autonomía o cuidados mínimos después de recibir el tratamiento rehabilitador
-
Pacientes, familiares y profesionales han realizada una sesión conjunta de musicoterapia, han escrito mensajes de deseos de recuperación y han lanzado globos naranja, color que identifica al ictus
Pacientes, familiares y profesionales del Hospital Casaverde Valladolid han celebrado un acto de conmemoración del Día Mundial del Ictus con el fin de visibilizar la enfermedad.
El acto ha consistido en una suelta de globos naranja, color que simboliza la lucha para superar la enfermedad, así como la escritura de una lista de deseos por parte de los pacientes. La mayoría anhelan recuperar su vida anterior al ictus y poder volver a estar junto a sus familiares y amigos. Yanira, musicoterapeuta del hospital, puso la banda sonora de la jornada con una sesión conjunta de musicoterapia, práctica que mejora la recuperación cognitiva y previene la depresión.
El ictus es una enfermedad que afecta cada año en Castilla y León a más de 5000 personas. El 85% de las personas que lo sufren sobreviven y, de ellas, cerca de un tercio necesitan rehabilitación.
El Hospital Casaverde Valladolid de rehabilitación neurológica y física, abrió sus puertas en octubre de 2023 y tras un año de actividad ha atendido a más de 200 pacientes, de los cuales un 87% recuperaron la autonomía o los cuidados mínimos después de completar su proceso de rehabilitación.
Desde el Grupo Casaverde, en el Día Mundial del Ictus, se ha lanzado la campaña “Independizarse” con la que quiere poner en valor el proceso de recuperación de independencia personal tras superar la fase aguda de la enfermedad. La iniciativa incide en la importancia de prevenir la enfermedad desde edades tempranas, ya que en los últimos años se ha incrementado su prevalencia en un 25% en adultos con edades comprendidas entre los 20 y los 64 años.