-
La secretaria autonómica ha asistido al acto de entrega de esta actuación, que ha supuesto una inversión de 7,1 millones de euros
-
El nuevo teatro ocupa una superficie de más de 3.200 metros cuadrados y podrá acoger a 644 espectadores
La secretaria autonómica de Cultura, Pilar Tébar, ha visitado hoy la localidad de Crevillente donde ha presidido, en representación de la Conselleria de Educación, Cultura, Universidad y Empleo, la recepción de manos de la empresa adjudicataria de las obras del nuevo Teatro Chapí, que han supuesto una inversión de más de 7,1 millones de euros.
Durante el acto, al que ha asistido también la alcaldesa de la localidad, Lourdes Aznar, Pilar Tébar ha destacado el “éxito de la gestión de Consell en esta legislatura”, que ha permitido “desbloquear un proyecto iniciado hace años, muy esperado por la sociedad de Crevillente”.
Asimismo, la secretaria autonómica ha apuntado que el propósito de la Conselleria es que la gestión del coliseo pueda ser llevada por parte del Ayuntamiento, para lo que ya se está trabajando en la fórmula más adecuada para que el Teatro Chapí pueda abrir sus puertas al público lo antes posible”.
El Teatro Chapí de Crevillente dispone de una superficie útil de 3.252 metros cuadrados y podrá acoger a un total de 644 espectadores, 464 alojados en la platea y 180 en balcón. Además, cuenta con otros espacios polivalentes que pueden ser habilitados para uso tanto cultural como administrativo.
La idea de construcción de esta instalación surge en 2005 con la firma de un convenio con el Ayuntamiento de Crevillente, que cedió los terrenos para la construcción en la localidad de un espacio teatral que fuera, al mismo tiempo, un centro formativo.
Sin embargo, no fue hasta 2019 cuando se iniciaron las obras que, nuevamente, fueron paralizadas debido a diversas modificaciones del proyecto inicial a lo que se sumó la revisión de precios motivada por la pandemia y la guerra en Ucrania, que provocó un encarecimiento de los materiales y costes de producción.
Fue a partir de noviembre de 2023, ya en la presente legislatura, cuando se dio una solución que permitió finalizar las obras para su entrega a la Generalitat por parte de la empresa adjudicataria.