La Brigada “Almogávares” VI de Paracaidistas (BRIPAC) ha organizado, un año más, el ejercicio “Lone Paratrooper”, en la base aérea de La Virgen del Camino, en León. En torno a 160 militares –120 nacionales y 40 extranjeros– han participado en estas maniobras, entre el 17 y el 28 de junio, con el objetivo de mejorar la instrucción en los saltos paracaidistas en la modalidad de apertura manual.
Se ha dividido en dos fases: durante la primera semana, se han dirigido las actividades a las unidades nacionales. Concretamente, el Ejército de Tierra ha aportado personal de la BRIPAC –de las Compañías de Reconocimiento Avanzado y de Lanzamientos Paracaidistas– y del Mando de Operaciones Especiales. Por su parte, el Ejército del Aire y del Espacio ha colaborado con el Escuadrón de Zapadores Paracaidistas, el Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo y la Escuela Militar de Paracaidismo. Además, el Cuerpo Nacional de Policía ha contribuido con el Grupo Especial de Operaciones.
Durante la segunda semana, se han integrado militares procedentes de Estados Unidos, Francia y Portugal. De esta forma, se ha avanzado en la interoperabilidad a la hora de poner en común tácticas, técnicas y procedimientos de los países aliados.
Entre los hitos conseguidos en el “Lone Paratrooper” destacan dos. Por una parte, el lanzamiento a alta cota con máscaras de oxígeno desde el avión A-400 M, puesto que es la primera vez que se realiza con este modelo de aeronave y permite avanzar en el proceso de certificación de sus capacidades. Por la otra, las prácticas de equipamiento en vuelo, que concluyeron con un lanzamiento en apertura manual a 12.000 pies.