La Diputación de Alicante ha creado este año una línea de ayudas de 150.000 euros para colaborar con los ayuntamientos de la provincia en la elaboración de un censo de instalaciones y emplazamientos con presencia de amianto. La convocatoria, cuyo plazo de presentación de solicitudes ya está abierto y finaliza el próximo 7 de junio, está dirigida a municipios de menos de 20.000 habitantes.
“Hace más de veinte años que se prohibió el uso del amianto en la construcción. No obstante, durante décadas, este material ha estado muy presente en las obras y a día de hoy todavía son muchos los edificios que lo tienen en sus estructuras y elementos constructivos”, ha señalado la diputada de Medio Ambiente, Magdalena Martínez, quien ha explicado que con esta nueva línea de subvenciones “ayudamos a nuestros consistorios a dar los primeros pasos para llevar a cabo el proceso de desamiantado, ya que la retirada de esta peligrosa sustancia es compleja y debe seguir unos protocolos muy específicos y concretos”.
Los estudios, que serán realizados por los técnicos de la propia Diputación de Alicante, incluirán un censo de edificaciones públicas y privadas con presencia de amianto -con mapas descriptivos y capas de datos de diferenciación entre inmuebles públicos, privados, residenciales e industriales, por nivel de peligrosidad, tamaño y año de construcción-.
Los informes incluirán, asimismo, una propuesta de calendario de retirada recomendado para cada elemento constructivo censado en base a sistemas analíticos y metodológicos realizados y contrastados por inspectores de amianto según la norma UNE 171370-2.
