¿Quién es el Policrítico?
El Policlítico es el nombre que uso yo, Víctor Manuel Sanroma, como seudónimo cuando hablo de temas electorales en mi canal de Youtube. El nombre de Policrítico lo uso desde principios de 2022 como nombre de mi canal en Youtube cuando decidí dedicar más tiempo a mi canal. Significa crítico político… O mejor dicho… soy muy crítico con los políticos, jeje…
Convertí un canal personal con cuatro videos en un canal pseudoprofesional con un objetivo claro, fomentar la cultura electoral y política de los españoles. Creé la marca de El Policrítico y en base a ello diferentes secciones como “Entrevistas Policríticas» y el programa «Policríticos».
Esto comenzó en febrero del año pasado y mis programas fueron emitidos en canales como Edatv y posteriormente circulo TV, cada uno de un espectro ideológico totalmente diferente. En todos mis programas se habla de política desde un punto de vista respetuoso y tratando de formar a la gente en aspectos que tal vez desconozcan. Principalmente el tema más importante que tocamos es el de la ley electoral española.
Por otro lado, también hemos hecho seguimiento de campañas electorales como la campaña andaluza del año pasado y las últimas elecciones locales y autonómicas en un programa llamado ruta 28m.
También y debido a diferentes personas que me lo han comentado, he realizado varios programas relacionados con los » niños robados”, un tema muy peliagudo. A mí francamente me sorprendió la gravedad de los hechos que se denunciaban por parte de las personas entrevistadas y ha sido un programa que para mí ha supuesto un shock en cuanto a la realidad que vivimos en España tristemente. De febrero de 2022 a agosto pasé de cincuenta suscriptores a más de 1.000.
Antes de comenzar mi canal publiqué un libro. Fue en abril de 2021. Mi primer libro se titula «El método Sanroma, no más votantes basura».
En él analizo la ley electoral española y sus problemas. Doy soluciones a los problemas que sufrimos millones de votantes. Como por ejemplo el voto basura y la discriminación de los partidos minoritarios respecto a los mayoritarios.
Después de las próximas elecciones generales de julio publicaré mi segundo libro. En él analizaré de nuevo la LOREG de un modo mucho más profundo y con aspectos que no pudieron entrar en el primer libro. Y haré una simulación de todos los resultados de las elecciones locales autonómicas y nacionales usando el método que yo he inventado y utilizo.
El mío es un método verdaderamente proporcional y justo con partidos, votantes y territorios. No como el actual método D’Hondt que discrimina a millones de votantes y al 95% de los partidos.
¿Dónde podemos encontrar tus libros?
Mis libros están en plataformas digitales y también se venden en librerías, también por otro lado, he vendido yo muchos a nivel particular y en ellos hago unas dedicatorias especialmente bonitas y personalizadas para quien me lo compra.
¿Qué es lo que define a tus libros que defienden tus libros?
Mis libros critican que el sistema electoral que tenemos en la actualidad beneficia a quien lo creó y no a los votantes y partidos. Que somos, al fin y al cabo, los usuarios de este sistema.
Así pues, PP y PSOE son los partidos beneficiados a costa de partidos como por ejemplo PACMA o escaños en blanco, que ni siquiera están en las administraciones pudiendo estarlo.
En cuanto a los votantes critico que diez millones de personas ya ni siquiera van a votar por culpa del propio sistema y critico que dos millones y medio de votantes que sí que van a votar, tienen voto, pero no tienen voz. Son los denominados votantes basura. Yo he sido uno de ellos y de hecho es el leitmotiv de mis libros.
Por otro lado, multitud de partidos están perjudicados por esta ley electoral puesto que si se benefician a uno se perjudican a otros. Se benefician siempre al primer y segundo partido por circunscripción y se perjudican a todos los demás, es decir el 95% de los partidos en España están perjudicados por esta ley electoral.
Finalmente, también hablo de los territorios, que en este caso son las provincias, que son las que conforman las circunscripciones. Si bien estas circunscripciones deberían poder cambiarse y deberían ser autonómicas al no poder cambiarse porque la Constitución no se va a cambiar por ahora. Mantenemos estas provincias como circunscripciones. Resulta que no tienen las cifras de escaños que deberían tener. Hay provincias que están sobrerrepresentadas y provincias que están infrarrepresentadas. El ejemplo es Madrid y Teruel que al contrario de lo que pueda parecer Madrid está sobrerrepresentada y Teruel infrarrepresentada.
Es por ello que yo he elaborado una solución para dar una cifra correcta de escaños a estos territorios. La clave es introducir la superficie de cada uno de ellos en estas cuentas. Hoy todos los territorios tienen un mínimo de dos escaños cuando por ejemplo la provincia de Álava es cinco veces más pequeña que la provincia de Teruel. Por lo tanto, no deberían de tener los mismos escaños iniciales una y la otra. Si contamos el territorio y contamos la población en el doble que el territorio nos salen cifras como que Teruel en vez de 3 debería tener 4 escaños y Madrid tendría 35.
Entre la primera y la última de las provincias que conforman España no habría nunca una diferencia de más de diez veces. Así es como se tendría un parlamento justo y un parlamento en el cual la representatividad sería máxima sin perjudicar la gobernabilidad.
La fórmula D’Hondt nos lo vendieron como un buen sistema proporcional, pero es precisamente el menos proporcional de todas las fórmulas que existen. Mi fórmula sí que es verdaderamente proporcional y hace que el Parlamento sea una imagen fiel de la sociedad. Y una vez constituido el Parlamento hay que parlar para gobernar, para acordar y para que la gente viva mejor.
Critico esta ley y ojalá todo lo que yo propongo se incluya dentro de una nueva ley electoral. porque sí que vivimos en una democracia, pero una democracia que es una partitocracia y que es muy mejorable. El pueblo debería tener más poder, debería poder votar más veces debería poder revocar a los políticos que trabajan mal y sin embargo son los políticos y los partidos los que tienen el verdadero poder a costa de los ciudadanos. Esto debe cambiar de un modo políticamente correcto y dentro de las instituciones, pero hace falta que los partidos apoyen esto.
Pero hoy PP y PSOE no la apoyan. Deberíamos hacer que piensen y replanteen sus posiciones porque a ellos mismos también al final les beneficiaría.
¿Cómo ha sido el tema de escribir un libro sobre ley electoral una cosa tan extraña?
Bien, a mí siempre me ha gustado la política. Desde los 16 años he estado metido dentro de partidos políticos. He sido militantes de Chunta Aragonesista durante 18 años y posteriormente lo he sido hasta hace dos años de Podemos. Siempre me ha interesado el punto de vista organizativo si bien es cierto que a veces he visto cosas que no me han gustado nada, sobre todo relacionados con las cúpulas de los partidos, lo que ha hecho que me salga. Ahora no milito en ningún partido por primera vez en mi vida. Ahora sigo como «observador». Me gusta estar y analizar el sistema que tenemos en España y compararlo con otros.
Creo que como ciudadanos nos merecemos todo lo máximo para estar bien representados y que nuestros gobernantes sean prácticamente meros gestores de la ciudadanía y la opinión mayoritaria. Creo que el sistema proporcional es mejor que el sistema mayoritario y creo que sin embargo el sistema proporcional está poco y mal desarrollado porque está creado por señores mayores de letras haciendo trabajo de personas de ciencias.
Las matemáticas juegan un gran papel en toda esta política. Y también la filosofía, pero cuando la filosofía y la política la quieres llevar a la realidad al final se habla de números… números de votos, de número de escaños, de número de personas que eligen y por lo tanto de matemáticas y las matemáticas en este caso perjudican a los votantes y a la mayoría de los ciudadanos en beneficio de unos poquitos poquitos políticos.
¿Qué habría que cambiar?
Hay que cambiar muchas cosas, lo que va bien mejorarlo y lo que no va, hacer que vaya bien.
Y lo que se ha demostrado que ya no funciona … directamente eliminarlo. En este último caso me refiero al Senado, el cual se ha demostrado que no funciona y que solo es un cementerio de elefantes y ¡ojo yo me he presentado al Senado!
Hace unos años, pensando que podría ser algo más decisivo de lo que es, pero he visto que no, que sigue siendo un cementerio de elefantes y que no tiene capacidades reales de ir en contra de las decisiones del Congreso. Número uno eliminamos al Senado porque no es una cámara territorial sino un cementerio de elefantes. Una vez que el Senado está eliminado lo que debemos hacer es dar una proporción correcta a todas las provincias que están representadas en el Congreso. Yo planteo para empezar que los escaños que tienen las provincias preasignadas antes de las elecciones sean una cifra diferente. Cada una de estas cifras lo que hago es coger su superficie y coger a su censo y valoro el censo en el doble que la superficie y de ahí sacó los escaños correspondientes que debería de tener cada uno. (manteniendo a Ceuta y Melilla 1).
Todos los demás variarían sus cifras hacia arriba o hacia abajo en función de lo que realmente tienen, tanto de superficie como de población.
Una vez que cada provincia tiene sus escaños correspondientes previos al reparto del día de las elecciones lo que toca es hacer un buen reparto el día de las elecciones.
Hoy por hoy sufrimos la Fórmula D’Hondt, una fórmula matemática que funciona para algunas cosas, pero para repartir escaños en este caso se ha quedado obsoleta. Y se ha quedado obsoleta porque beneficia solo a los grandes y es injusta. Es la fórmula menos proporcional de todas las que existen dentro de las proporcionales. Yo lo que planteo es precisamente una fórmula realmente proporcional similar a lo que sería una regla de 3 y que después repartiría los escaños en función de las cifras Y estas cifras incluyen decimales. Es decir, un partido en vez de tener 0,1,2,3 o 4 diputados exactos podría tener perfectamente 1,7 o 2,5. Todos estos diputados de todas las circunscripciones acabarían finalmente sumándose entre sí y proporcionarían la cifra final de escaños.
Como ejemplo tengo que decir que basándonos en las últimas elecciones tanto PP como PSOE yo les doy aproximadamente 20 escaños menos de los que reciben cada uno, puesto que estos escaños se les han regalado por parte del sistema y a cambio se les han quitado a partidos pequeños que ni siquiera pueden entrar con cientos de miles de votos.
Con mi fórmula electoral soy justo con los partidos, pero también hago que los votantes tengan resultados justos de su representación obtenida y elimino lo que es el voto útil y también el voto basura que hoy dos millones y medio de personas sufrimos.
Pretendo una ley electoral más proporcional, más justa, más transparente y más económica y para ello hago una serie de propuestas que en el libro figuran y que gustosamente estaré encantado de explicar a aquellos que adquieran el libro y me lo quieran consultar más en profundidad.
Creo que es importante la cultura política y precisamente de eso se trata mi canal, de dar información sobre cultura política, de cómo se vota, de qué es una circunscripción, de cuántas hay, de cómo se hacen los repartos, de qué se podría mejorar y al fin y al cabo se trata de que la gente y los votantes cuando participamos en las elecciones tengamos toda la información necesaria para tomar nuestras decisiones.
Porque un votante cuando vota nunca se equivoca si tiene la información adecuada, vote lo que vote.
