Ocaña puede presumir de tener un “Bien de Interés Cultural”, declarado en 1976. como es la desconocida Fuente Grande. Una obra de ingeniería hidráulica.
La construcción de la Fuente Nueva, como se la conoció en origen, tuvo lugar en torno a los años de 1573 y 1578, en tiempos de Felipe II. Su diseño, atribuido a Juan de Herrera, discípulo y sucesor de Juan Bautista de Toledo, recuerda a la estética arquitectónica empleada en la construcción de la fuente de la Plazuela de los Caños del Peral, o de las grandes obras reales como San Lorenzo de El Escorial o el vecino Palacio de Aranjuez. Hasta su construcción no habia agua en las casas, resolviéndose el abastecimiento de la Villa mediante la disposición de aljibes o pilas en las plazas y junto a puertas y murallas.
«No podemos dejar que sigan mancillando nuestro patrimonio con la única intención de divertirse»
Ahora, han aparecido nuevas pintadas que nos comunica desconsoladamente Julia Ramírez la Presidenta de la Asociación Amigos de la Fuente Grande de Ocaña: «Esta mañana me encontraba feliz visitando la torre del teatro recién restaurada, ha quedado genial, cuando alguien me ha comentado que había nuevas pintadas en nuestra querida Fuente Grande.» y continua diciendo «Al terminar la visita me he bajado a la Fuente Grande y ésto es lo que me he encontrado, y muchas más» y termina preguntandose «¿Qué podemos hacer ante tanta barbarie, tan poca educación, tan poco reconocimiento por nuestro patrimonio?»
José María Sarriá
Redacción Toledo